La nominada que casi nadie ha pelado


Ya en serio, si hay una predicción que puedo hacer sin temor a equivocarme es que Invierno profundo (Winter's Bone, 2010) no va a ganar el Óscar a mejor película. Está ahí, en esa lista de diez, de relleno. Seguramente los dinosaurios de la Academia pensaron que ya con nominarla la premiaban. Y tienen razón. Con cada año se fortalece mi teoría de que el Óscar decide nominar y premiar cierto tipo de cintas (sobre todo, independientes) para absorber algo del prestigio que estas obras han ido cosechando a lo largo de su paso por diversos festivales del mundo. Winter's Bone de Debra Granik fue la ganadora del gran premio del jurado en Sundance. De ahí ha seguido un largo camino. Tanto así que ya está desde hace tiempo en formato devedé por acá. Su carrera termina cuando es nominada a cuatro premios Óscar: mejor película, actriz, actor de reparto y guión adaptado.
Invierno profundo es un largometraje hecho por mujeres (tanto la directora como las productoras); pero no necesariamente para mujeres. Jennifer Lawrence (quien ya se destacara en Fuego de Guillermo Arriaga) lleva a cuestas el rol principal de Ree, una adolescente que vive en una región montañosa y empobrecida de Estados Unidos. Con la madre medio loca y el otro medio deprimida y el padre desaparecido, Ree debe encargarse de criar a sus hermanos menores y, para colmo, salvar la propiedad que su padre (un delincuente bien conocido) ha hipotecado para obtener una fianza. Ree tendrá que recorrer su comunidad (una que semeja estar repleta de relaciones endogámicas pues todos son primos de todos) para hallar a su padre o lo que quede de él. Las reacciones a las preguntas de Ree irán desde el silencio hasta la violencia.
Por supuesto, hay que recalcar la actuación encomiable de una actriz tan joven. De eso no hay duda. El resto de las voces han alabado Winter's Bone clasificándola como una especie de tragedia griega donde la heroína sale a terrenos peligrosos en busca de los huesos de su padre para en cierta forma encontrar la reivindicación. Sí, también es eso. En mi caso no sé muy bien qué haya sido; pero Invierno profundo no me dejó huella. Encontré su ritmo monótono, sus personajes patéticos (entre drogadictos pálidos y deprimidos) y la historia poco interesante. Uno quisiera ponerse del lado de una cinta cuyo presupuesto es ínfimo y cuyo talento se encuentra ahí. Sin embargo, es posible que ese día que la renté no haya estado de humor para algo tan denso. Por supuesto, el cuarteto de nominaciones por parte del Óscar le ha valido también la fecha de estreno en México para el 4 de marzo.

El avance: http://www.youtube.com/watch?v=5O8F8JtSVmI

Y hablando de otros estrenos atrasados, según el sitio de Cinemex, a México llega La nana el 11 de marzo y, según Cinépolis, una semana después también arriba el crédito anterior al más reciente de Woody Allen Así pasa cuando sucede. Las dos son cintas del 2009.